Investigadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa desarrollaron, a partir de microalgas, una bebida de clorofila que aporta beneficios a la salud y a la cosmética gracias a su alta cantidad de antioxidantes.
De acuerdo con la Agencia de Investigación y Desarrollo ID, este estudio ya está en trámites para obtener dos patentes debido a que cuenta con metodologías que tienen posibilidades de ser transferidas a la industria.
La investigación comenzó hace tres años en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona, y los investigadores utilizan microalgas debido a sus altas cantidades de aceite para la obtención de biodiesel, cuyo proceso genera masa residual que es desechada.
De acuerdo con el investigador del laboratorio de Biotecnología e Ingeniería de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Ángel Valdéz, se realizaron pruebas a las microalgas para detectar que eran ricos en clorofila.
“Entonces, nuestra tarea fue el aislamiento y caracterización química de la clorofila contenida de los solventes. Posteriormente se analizó la funcionalidad biológica de esta clorofila, a través de ensayos in vitro de inhibición de enzimas relacionadas con la oxidación y el envejecimiento celular, la hipertensión arterial y la hiperglucemia; además se demostró que está molécula posee actividad antimicrobiana”.
Luego, comenzaron con los trabajos para que la clorofila obtenida fuera soluble al agua, para lo que se utilizó un método de derivatización en donde mediante un procedimiento químico se elimina el magnesio y se sustituye por cobre.
El científico mexicano, que ha ganado en dos ocasiones el Premio Nacional de Ciencia y Tecnología del Conacyt, expuso que “elaboramos bebidas funcionales a partir de la biomasa residual para que quien la consuma tenga beneficios a la salud y en la belleza, por el enorme potencial antioxidante. No tiene olor ni sabor a alga”.
En México, añadió el especialista, el cultivo de microalgas es viable; incluso pueden crecer en agua de mar en condiciones controladas.
Fuente: Notimex