PON EL MOUSE EN LA IMAGEN PARA DETENERLA Y ACCEDER

UdeC Hola Soy Balto Recolección de Ramas

viernes, 22 de junio de 2018

En el país no hay escasez de agua, sino un inadecuado manejo integral de ese recurso; el 90 por ciento de los ríos están contaminados



En el país no hay escasez de agua, sino un inadecuado manejo integral de ese recurso, señalaron los académicos de la UNAM María del Carmen Carmona Lara, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ), y Joel Carrillo Rivera, del Instituto de Geografía (IGg). 

Mediante 10 decretos presidenciales se levantó la veda de aguas superficiales en 295 cuencas del país; el objetivo es el manejo de una nueva visión para la restauración y preservación del equilibrio ecológico, explicó Carmona Lara. 

La universitaria indicó que “lo que genera inconformidad por estos 10 decretos es el hecho de que estamos frente a facultades exclusivas del Presidente de la República, cuya decisión se basa en estudios técnicos realizados por la Comisión Nacional del Agua”. 

Consideró que el decreto preocupante no es el que salió el 6 de junio, porque su propósito es crear la Reserva Ecológica del Agua para manejar el caudal ecológico; “el que debe revisarse es el del 23 de marzo de este año”. 

Para Carmona Lara, esos ordenamientos muestran la inconsistencia de la gestión del agua, pues aunque refieren que son para fortalecer la gestión integrada del recurso hídrico, son instrumentos que tendrán que acordarse con los consejos de cuenca, caso por caso. 

Desde el punto de vista jurídico, se necesitaba levantar la veda, pero ésta es parcial, para destinar una parte del agua al equilibrio ecológico, aclaró. “Lo que esperamos son 295 programas de reservas de agua en cada una de las cuencas, en donde sepamos cómo se cuida el caudal ecológico reservado para el sustento del ambiente”, subrayó. 

Pero más de 90 por ciento de los ríos están contaminados, algunos declarados muertos. “Estamos reservando el agua cuando ya la ensuciamos; con esa falta de calidad es nada más un paliativo sin consistencia a futuro”. 

Además, criticó que se hable de volúmenes y cantidades del recurso sin mencionar la calidad. 

En su oportunidad, Joel Carrillo Rivera apuntó que en los decretos “todo se enmarca de acuerdo con el caudal ecológico, que se encuentra dirigido únicamente al cauce del río, no a comprender qué pasa en toda la cuenca que aporta agua al río; es decir, se refiere sólo al agua superficial y no considera la subterránea ni de dónde proviene o hacia dónde va”. 

Dijo que, cuando no llueve, el río de todos modos lleva líquido proveniente de aguas subterráneas, que se generan en algún lugar de la nación, y es indispensable tomarlas en cuenta cuando se legisla al respecto. 

Los ríos y cuencas no son entes separados ni autónomos, sino interconectados. Tienen un flujo horizontal que sí se considera en las leyes, y otro vertical que no se toma en cuenta. “Noventa y siete por ciento del agua es subterránea,” concluyó.

Fuente: UNAM Global